Uso de internet por parte de los jóvenes y dependencia de los teléfonos móviles

Introducción

En la actualidad, los sistemas técnicos representados por dispositivos inteligentes cada vez más compactos y multifuncionales facilitan la vida de las personas, son cómodos, accesibles, fáciles de usar, y tienen las características de estar integrados con los sistemas comerciales y académicos, permitiendo el acceso a la red para obtener información de forma inmediata y rápida, admitiendo la comunicación con personas que pueden estar a miles de kilómetros de distancia. Sin embargo, esto no es suficiente cuando es necesario analizar las posibles consecuencias de un uso inadecuado de los dispositivos tecnológicos (como los teléfonos móviles) en espacios específicos como escuelas u hogares. Esto plantea muchas preguntas sobre su impacto, especialmente en los jóvenes sobre las actividades académicas, relaciones interpersonales e incluso nuevos sistemas de aprendizaje y comunicación en la familia.

Desde la posición de (Seko, Kidd, Wiljer, & McKenzie, 2015), las tecnologías de telefonía móvil han sido aclamadas como un medio prometedor para brindar intervenciones de salud mental a jóvenes y adolescentes, el grupo de edad con una alta penetración de teléfonos celulares y con la aparición del 75% de todos los trastornos mentales a lo largo de la vida. Sin embargo, a pesar de la creciente evidencia en salud física y salud mental de adultos, hay poca información disponible sobre cómo se implementan los teléfonos móviles para brindar servicios de salud mental a la población más joven.

El objetivo principal de esta investigación consiste en aportar información articulada a la prevalencia del uso problemático de las TIC, en otras palabras, determinar los criterios que pueden indicar el abuso inoportuno del teléfono móvil, y así poder establecer futuras líneas de investigación que permitan elaborar programas de prevención.

El desarrollo de este sondeo muestra que, en los últimos quince años, diferentes investigaciones se han centrado en determinar la distribución, la frecuencia y las causas de la adicción a las TIC sobre todo en lo que respecta al internet y al teléfono móvil. Por tanto, parece evidente que estas dos variables son actualmente pilares básicos en la revolución social que los jóvenes están llevando a cabo con el empleo de estas tecnologías.

El impacto que asumirá este trabajo en el ámbito tecnológico es ofrecer información sobre la prevalencia de conductas adictivas del uso de Internet y teléfonos móviles. Puesto que, el uso problemático de estos dispositivos TIC se ha relacionado con el consumo de drogas, el bajo rendimiento académico y las malas relaciones familiares. En este escenario, también se espera investigar la asociación entre la prueba de adicción a Internet (IAT) y el cuestionario de dependencia de teléfonos móviles (MPDQ) como una prueba de validez concurrente.

Desarrollo

Para la presente investigación se han obtenido diversos recursos de información del país y del mundo, de modo que, sirva para dar un enfoque a la prevalencia del uso problemático de las formas de adicción a la tecnología.

Dependencia

Es importante mencionar que el fenómeno, de la dependencia a la telefonía celular viene de unos años atrás. Puesto que, este surge en primera instancia como un medio de resolver necesidades básicas de comunicación a distancia, de una manera práctica que permitiera la movilidad del instrumento, sin embargo, en la actualidad el celular se ha transformado en un objeto indispensable en la vida diaria de los seres humanos, y de la cual ya dependen en todo tipo de actividad.

Entorno Social

La dependencia de los jóvenes de los teléfonos móviles no solo se refleja en los problemas derivados del uso de teléfonos móviles en las aulas académicas, sino también en su vida diaria, porque no importa a dónde vayan, siempre están al tanto de los teléfonos móviles. A tal punto que muchos se aíslan de su familia o amigos para hacer uso del teléfono celular, y no solo para responder o realizar llamadas, sino también para aprovechar las diversas funciones de estos dispositivos.

Las intervenciones tanto en la reducción de la dependencia del teléfono móvil como en la mejora del ajuste universitario (especialmente entre aquellos con dependencia del teléfono móvil) son posibles y necesarias entre los estudiantes universitarios nuevos para prevenir su depresión y ansiedad futuras. Estas intervenciones deben incorporarse a los programas de educación regular en las universidades.

A juicio de (Nahla Khamis, y otros, 2018), preponderó una alta frecuencia de uso de Mobile Phone (MP). Donde manifiesta que alrededor de dos tercios de los participantes tenían una mala calidad del sueño. Las mujeres, los propietarios de teléfonos inteligentes durante 1 año y el aumento del tiempo dedicado a MP se asociaron con la dependencia de MP. Los alumnos de menor rendimiento académico obtuvieron puntuaciones de MP significativamente peores en problemas financieros, uso peligroso y PUMP total. La dependencia de MP se correlacionó con la puntuación subjetiva de la calidad del sueño y la latencia del sueño. La escala global de PSQI se correlacionó con el uso prohibido de MP. Definiendo así, que la dependencia de MP se correlacionó con la mala calidad subjetiva del sueño y la latencia del sueño.

Un punto importante a destacar en esta instancia, es que las intervenciones tanto en la reducción de la dependencia del teléfono móvil como en la mejora del ajuste universitario (especialmente entre aquellos con dependencia del teléfono móvil) son posibles y necesarias entre los nuevos estudiantes universitarios para prevenir su depresión y ansiedad en el futuro. Considerando que estas injerencias deben incorporarse a los programas de educación regular en las universidades.

Utilización del teléfono móvil

El uso de teléfonos móviles ha hecho que sean cada vez más diversificados, la confianza de ellos en los jóvenes ha aumentado de una manera importante.

De acuerdo con, (Ruiz Palmero, Sánchez Rodríguez, & Trujillo Torres, 2016), los índices de consumo problemático de teléfonos móviles en España oscilan desde el 2,8%, hasta el 19,5%, en dichos estudios se observa que las mujeres tienen en general más problemas en el uso del móvil y lo perciben como más inseguro. De hecho, existen estudios que afirman que los adolescentes priorizan la comunicación mediada por el móvil, estando más preocupados de sus relaciones a través de este que de las personales. Todo ello puede provocar a la larga problemas en las relaciones cara a cara, así como ansiedad en los adolescentes cuando están esperando la respuesta a algún mensaje enviado y esta no llega o no tiene acceso al móvil en un determinado período de tiempo.

En una encuesta realizada por la Universidad de Stanford en 2010, se encontró que entre 200 estudiantes que usan iPhone, el teléfono inteligente de Apple (una marca típica de teléfonos inteligentes) puede ser extremadamente atractivo para los nuevos usuarios y los consumidores a largo plazo. En total, el 10% de los participantes eran completamente adictos a su iPhone, el 34% se clasificaron como casi adictos a él y el 6% dijo que no eran adictos a él en absoluto. Además, el 75% admitió dormir junto a su iPhone y el 69% informó que era más probable que olvidaran su billetera que su iPhone. Aunque la admisión de adicción severa no fue muy alta entre los efectos secundarios de la adicción al iPhone, el 41% dijo que sería "una tragedia" perder su iPhone y el 22% dijo que es "peligrosamente atractivo”. (Hope , 2020)

Utilización del Internet

El uso de Internet tiene un efecto mixto en el bienestar de jóvenes, con evidencia de una mayor autoestima y apoyo social percibido junto con efectos dañinos como una mayor exposición a contenido gráfico y ciberacoso. Los casos de alto perfil de ciberacoso y suicidio durante la última década y los informes de grupos de suicidios facilitados por las redes sociales han hecho que los investigadores centren cada vez más sus esfuerzos en comprender la relación entre el uso de Internet y las autolesiones y el suicidio.

Una revisión preliminar que examinó el uso de sitios dedicados de apoyo a las autolesiones en los jóvenes encontró altos niveles de apoyo disponibles en línea junto con la normalización del comportamiento de autolesiones. Una revisión sistemática más reciente relacionada con la autolesión y el uso de Internet en jóvenes encontró además evidencia de intercambio de información sobre métodos de autolesión y ocultación, una menor sensación de aislamiento y refuerzo de conductas positivas como la búsqueda de ayuda. A partir de ello, se define que el Internet ejerce influencias tanto positivas como negativas sobre la autolesión y brinda una oportunidad para la intervención, lo que está respaldado por varios estudios más recientes.

En este contexto, la investigación sobre Internet y las autolesiones en los jóvenes está evolucionando rápidamente en un intento por mantenerse al día con la naturaleza continuamente cambiante de su uso. En general, considerando la calidad de los estudios y el número de participantes evaluados en esta revisión, existe un potencial significativo de daño como resultado del comportamiento en línea en relación con la autolesión y el comportamiento suicida (normalización, desencadenamiento y competencia entre usuarios, una fuente de contagio) e información dañina para las personas vulnerables), pero también el potencial para explotar sus beneficios (un sentido de comunidad, apoyo a las crisis y reducción del aislamiento social). La atención debe centrarse ahora en una variedad de medios de Internet, incluidas las redes sociales, el intercambio de videos / imágenes y la posibilidad de que Internet se utilice en terapia y recuperación.

Adicciones a Internet y teléfonos móviles

Es importante tener en cuenta que nadie es adicto a Internet ni a un teléfono celular en sí. Sería más exacto decir que una persona es adicta al entretenimiento y la comunicación que brindan estas tecnologías. No obstante, las definiciones de investigación de la adicción a Internet y la adicción a los teléfonos móviles son consistentes con las conceptualizaciones generales de la adicción. Algunas definiciones se refieren a la incapacidad de regular el uso, lo que tiene como resultado consecuencias negativas para los aspectos sanitarios, sociales y económicos de la vida.

Otras definiciones enfatizan el uso compulsivo, el deseo, la tolerancia, la abstinencia y la disfunción como características clave. Es probable que la tolerancia lleve a dedicar cada vez más tiempo al dispositivo para lograr la satisfacción. Los síntomas de abstinencia incluyen irritabilidad, depresión y molestia cuando el usuario no puede utilizar Internet o el teléfono móvil, mientras que al mismo tiempo tiene pensamientos obsesivos o fantasías sobre el uso de la tecnología para reducir los síntomas de continencia.

Según (Chin, 2018), muchas de las definiciones de investigación de la adicción a Internet y la adicción al teléfono móvil se basan en los criterios para otros trastornos en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales , ya sea la 4 ª edición (DSM-IV; Asociación Americana de Psiquiatría, 1994) o 5 ª edición (DSM -5; Asociación Estadounidense de Psiquiatría, 2013). Específicamente, los investigadores han utilizado los criterios de diagnóstico para la dependencia de sustancias (DSM-IV) o el trastorno por uso de sustancias (DSM-5) y el trastorno por juego (DSM-5), para definir la adicción a Internet y la adicción a los teléfonos móviles. El DSM 5 también enumera el trastorno de los juegos de Internet como una condición para estudios posteriores, con la posibilidad de que se considere un trastorno formal en ediciones futuras del DSM.

El teléfono móvil otorga al usuario diversas funciones, como mensajería instantánea, navegación por Internet, uso de redes sociales, música, videojuegos, noticias, fotografía y video. En lo laboral, los teléfonos inteligentes pueden incluso mejorar la eficiencia del trabajo. Esta versatilidad convierte al dispositivo en un objeto muy atractivo, especialmente para los jóvenes que se están moviéndose en esta dirección. En vista de ello, se señala una serie de características que hacen que los teléfonos móviles tengan tanta repercusión en el mundo juvenil:

Autonomía: precisa el espacio personal y otorga cierta autonomía a los padres.
Identidad y prestigio: las marcas de telefonía móvil, la mejor tecnología, la moda les otorga un cierto estatus en el grupo social.
Aplicaciones tecnológicas: la tecnología y la innovación informática son sumamente atractivas para los jóvenes.
Actividad de ocio: la innovación no es solo un servicio de comunicación, sino también un servicio de disfrute del tiempo libre a través del juego.
Fomento y establecimiento de relaciones interpersonales: las diferentes aplicaciones de los teléfonos inteligentes pueden establecer relaciones interpersonales especiales, expresar amistad, lograr comunicaciones específicas o incluso llamadas pérdidas.

Adolescentes y móvil: ¿cuándo es exceso de uso y cuándo adicción?

Desde el inicio de la pubertad, los teléfonos móviles se han convertido en parte de los jóvenes de hoy, otro apéndice, algunos de los cuales se han resumido gráficamente. Lo usan más que nadie, y ciertamente mejor que nadie. Pero también hay casos de abusos y abusos. Este problema preocupa a los padres, especialmente a los más jóvenes. La consulta médica ha atraído la atención de la gente. Josep Matalí, responsable de Psicología y Adicciones del centro, reconoció que los hospitales infantiles más importantes como Sant Joan de Déu (Esplugues de Llobregat) reciben cada vez más consultas de sus padres, impactado por el niño "colgando del teléfono".

Matalí explica que es comprensible que los padres anticipen el riesgo de adicción, no obstante, matiza, los smartphones actuales son en realidad una plataforma que los chicos y chicas usan para distintas cosas. Sí, pueden estar mucho tiempo con el móvil, la entidad americana Common Sense analizó que el 70% de los adolescentes usa las redes sociales varias veces al día y, más de la mitad de ellos dice que constantemente, a todas horas, pero un rato se envían mensajes por Whatsapp o Telegram, otros miran Instagram, otros vídeos en YouTube o Tik Tok o tienen conectada la música de Spotify, juegan, ven series de Netflix y plataformas similares o la app de cualquier televisión, miran webs. Es decir, la mayoría no pasa horas haciendo lo mismo. No se trata sólo del móvil, sino de las apps que usan y cuánto usan cada una. (Ricart, 2019).

Aunque no haya adicción, muchos estudios relacionan un uso abusivo del móvil con multitud de trastornos, estudios realizados en diferentes países también han encontrado que esta relación está relacionada con la irritabilidad (también debido a la tensión familiar provocada por las discusiones sobre el uso del teléfono móvil), ansiedad, impulsividad y más dificultades para soportar la frustración y falta de interés en las interacciones sociales. Cómo puede causar una estimulación excesiva en el cerebro del infante (y se ha utilizado desde una edad muy temprana), se han realizado estudios advirtiéndolo, pero no se sabe cómo lo afectará. Por ejemplo, se ha señalado que el abuso de teléfonos móviles puede ser un factor de riesgo de hiperactividad.

En algunos estudios por ejemplo uno realizado por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos u otro en China, se ha relacionado ese uso abusivo este abuso está relacionado con el adelgazamiento de una parte de la corteza cerebral (en principio, la corteza prefrontal está relacionada con la madurez). Puede asociarse con un comportamiento más impulsivo, aunque no está claro el alcance de su posible impacto. Los oftalmólogos también prometieron que verán más casos tempranos de miopía, que se relaciona con pasar mucho tiempo frente a la pantalla. Sin mencionar que nutricionistas y médicos advierten que es propicio para una vida sedentaria y por lo tanto trae problemas de salud relacionados.

Además del uso excesivo de teléfonos móviles, el uso inadecuado de los teléfonos móviles en las redes sociales también conlleva otros riesgos. Matalí señaló que, por ejemplo, las niñas menores de 15 años, publican contenido altamente pornográfico en Instagram o redes similares, lo que puede convertirlas en víctimas de ciberacoso.

Prueba de adicción a Internet (IAT) y Cuestionario de dependencia de teléfonos móviles (MPDQ)

En esta sección, se proporciona una descripción general de las dos medidas que se analizaron en el estudio actual. La prueba de adicción a Internet que es la medida más utilizada de la adicción a Internet. La información se recopila a través de 20 elementos de autoinforme, y la adicción se define como el cumplimiento de cinco de siete criterios durante un período de seis meses: obsesión con Internet, pasar cada vez más tiempo en Internet, tener problemas de gestión del tiempo, intentos repetidos de reducir Uso de Internet, angustia ambiental, engaño con respecto al tiempo que se pasa en línea y modificación del estado de ánimo a través del uso de Internet. Se desarrolló y validó una versión de Hong Kong del IAT en una muestra de Ecuador y la medida mostró buenas propiedades psicométricas.

Como expresa (Chin, 2018), Leung creó la versión MPDQ como una herramienta de detección para la adicción a los teléfonos móviles. Los estándares son similares a los relacionados con la dependencia de sustancias en el "Manual de Diagnóstico y Estadísticas de Trastornos Mentales". La medida utiliza 20 ítems de autoinforme, basados en análisis factorial confirmatorio, para evaluar tres aspectos de la adicción al teléfono móvil: mensajes de texto compulsivos, llamadas y respuestas compulsivas y prejuicio contra el uso del teléfono móvil. Los resultados muestran que los jóvenes en Ecuador tienden a usar dispositivos inalámbricos para mantener relaciones cercanas con sus padres y amigos, y existen diferencias de género en la adicción a los mismos.

Tanto IAT como MPDQ se aplican a muestras de esta dependencia, y la evidencia sugiere que estas escalas son culturalmente apropiadas. Sin embargo, la efectividad de la coexistencia del MPDQ y las medidas establecidas para la adicción a Internet aún no se ha demostrado. Dado que el IAT y el MPDQ miden características similares y diferentes del uso de Internet y teléfonos móviles de adolescentes.

Materiales y métodos

Diseño y tipo de estudio

Para la obtención de esta indagación, se utilizaron estudios descriptivos, transversales y de diseño prospectivo. El mismo, se desarrolló mediante una investigación desde el enfoque cualitativo de tipo documental donde se aplica el método deductivo e inductivo con un alcance argumentativo exploratorio basados en fuentes principales, artículos e informes de investigación, sobre la temática de estudio, con el propósito de establecer relaciones, diferencias, etapas, posiciones y el estado actual del conocimiento respecto al tema. Para contribuir un poco más con la investigación también se realizó un sondeo respecto al incremento trascendental de las cuentas del servicio móvil avanzado y de acceso a internet, con el fin de determinar los aspectos relevantes en torno a la temática y las variables de estudio.

Resultados y discusión

El propósito de este artículo es mostrar que, el uso excesivo de Internet puede conducir a un trastorno mental de tipo adictivo, que puede afectar especialmente a personas con necesidades emocionales especiales, así como a adolescentes y adultos jóvenes. Entre las aplicaciones específicas de Internet, se encuentra un riesgo importante para el uso de aplicaciones comunicativas y sincrónicas, como los chats y los juegos de rol online, puesto que permiten la comunicación hiperpersonal, el juego con diferentes identidades, proyecciones y disociaciones sin consecuencias en la vida real. A diferencia de Internet, el uso inadecuado de teléfonos móviles puede considerarse abuso, no adicción.

En vista de ello, se expresa datos sobre el Servicio Móvil Avanzado (SMA) y de acceso a internet en Ecuador (2017)

Gráfico 1. Porcentaje de usuarios que acceden al Servicio Móvil Avanzado.

Fuente: Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones. (Arcotel, 2017)

Según el informe de ARCOTEL de julio de 2017, las estadísticas de Internet móvil reflejan el aumento significativo del servicio desde 2010. Si se considera los datos de 2015 a 2017, la tasa de crecimiento promedio de los servicios de Internet móvil es sencilla. Relacionado con la penetración de SMA en Ecuador. Por lo tanto, se cree que la implementación de tecnologías móviles como los proveedores de SMA (como la generación 3G y 4G) ha facilitado el acceso de los usuarios a las plataformas de navegación, y el uso de estas plataformas de navegación es incentivado por la provisión de contenido y acceso a redes sociales. (Arcotel, 2017)

En un estudio reciente (Lee, y otros, 2020), se consideró el modelo de regresión de cópula para hacer una regresión de las adicciones bivariadas sobre factores clínicos y psicológicos. Análisis de datos reales con 555 estudiantes (rango de edad: 14-15 años; hombres, N = 295; mujeres, N= 265) de las escuelas intermedias públicas de Corea del Sur. Al ajustar el modelo de regresión de cópula, investigamos la dependencia entre Internet y la adicción a los teléfonos inteligentes y determinamos los factores de riesgo asociados con las dos adicciones.

Además, al comparar los ajustes del modelo del modelo de cópula con la regresión lineal y los modelos lineales generalizados, se propuso el mejor modelo de cópula en términos de bondad de ajuste. Por tanto, se reveló que la adicción a Internet y a los teléfonos inteligentes no son problemas separados, y que se deben considerar las asociaciones entre ellos. Los factores psicológicos, como la ansiedad, el sistema de inhibición del comportamiento y la agresión también se asocian significativamente con ambas adicciones, mientras que los síntomas del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), se relaciona únicamente con la adicción a Internet.

Gráfico 2. Histograma y diagrama de densidad de las variables de respuesta: ( a ) Y-IAT; ( b ) SAS.

Fuente: Datos obtenidos de la revista PubMeb (Lee, y otros, 2020).

Gráfico 3. Las gráficas de los coeficientes de regresión al ajustar la cópula t, ( a ) la parte de la prueba de adicción a Internet (Y-IAT) y ( b ) la parte de la escala de adicción a los teléfonos inteligentes (SAS).

Fuente: Datos obtenidos de la revista PubMeb (Lee, y otros, 2020).

Se reveló que los síntomas de depresión y TDAH se asociaron significativamente con la adicción a Internet, aunque los poderes de importancia fueron bajos, mientras que no se observó una relación significativa para la adicción a los teléfonos inteligentes en este estudio. Este hallazgo demuestra la necesidad de evaluar y tratar las comorbilidades asociadas con la adicción a Internet. Además, en un estudio reciente que utilizó modelos de ecuaciones estructurales, los componentes afectivos, como la depresión y la ansiedad, se asociaron significativamente con la adicción a Internet y la adicción a los teléfonos inteligentes, mientras que la agresión, la expresión de ira y los síntomas del TDAH afectaron solo a la adicción a Internet. Los adolescentes se vuelven adictos más fácilmente a Internet o a jugar juegos de Internet para obtener recompensas instantáneamente y expresar sus sentimientos negativos a través de problemas externos, mientras que los adolescentes con depresión o ansiedad pueden usar Internet o teléfonos inteligentes para evitar o reducir su estado de ánimo negativo. (Lee, y otros, 2020)

Entre los datos obtenidos, el hallazgo más destacado es que la tasa de implantación de jóvenes que utilizan teléfonos móviles e Internet es muy alta. De igual forma se identificaron cuatro lagunas en el conocimiento actual: la escasez de estudios realizados en países de ingresos bajos y medianos, la ausencia de información sobre la viabilidad de las herramientas móviles en la vida real, la necesidad de abordar la cuestión de la alfabetización técnica y sanitaria de los usuarios jóvenes, y la necesidad de una discusión crítica sobre diversos temas éticos asociados con el uso de teléfonos móviles.

(Chin, 2018), expone que la adicción a Internet y la adicción a los teléfonos móviles son formas de adicción a la tecnología y, por lo tanto, se esperaría que muestren similitudes y diferencias. Además, manifiesta que el enfoque de "big data" ayuda a los investigadores a comprender el desarrollo de normas en diferentes edades, como estudiantes de primaria de 9 a 12 años, estudiantes de secundaria básica de 12 a 15, estudiantes de secundaria superior de 15 a 18 y estudiantes universitarios y de trabajo, adultos mayores de 18 años. Concluye que clasificar información de diferentes grupos de edad puede ayudar a rastrear fácilmente la variedad de diferencias entre los grupos de edad y las normas de desarrollo con respecto a la adicción a Internet y la adicción a los teléfonos móviles.

Mientras que, (Rodríguez Ceberio, Diaz Videla, Agostinelli, & Daverio, 2019), manifiesta que la presencia de los celulares en la vida cotidiana ha modificado la manera en que las personas se relacionan con la tecnología. Este dispositivo ha modificado y mejorado las comunicaciones, la inclusión social, la actividad económica y la productividad en varios sectores. Uno de los indicadores en relación con las adicciones sugiere una posible dependencia asociada al uso excesivo y persistente del celular, descripción que guarda relación con el concepto de adicción, puesto que, proveen un estado de gratificación inmediata y el vínculo que establece el usuario puede convertirse en conflictivo y entrar en la categoría de una adicción comportamental.

Conclusiones

En definitiva, el tiempo dedicado a usar Internet y el espacio de juego los fines de semana se consideran predictores importantes de la adicción al sitio virtual. Del mismo modo, usar teléfonos inteligentes ese lapso de tiempo, predijo activamente la dependencia de los dispositivos móviles. En consecuencia, estos resultados sugieren que el índice cuantitativo de cada tipo de medio refleja el nivel de adicción. En particular, la subordinación de los dispositivos móviles en los jóvenes afecta especialmente a las aulas universitarias, porque no se los utiliza correctamente. Por tanto, se debe apreciar la valoración de la competencia psicosocial, que parece evitar que los jóvenes abusen de los teléfonos móviles e Internet.

Las propuestas de investigación destacaron el impacto potencial del uso excesivo de Internet y el móvil, que va desde diferentes tipos de cefalea hasta otros síntomas somáticos. Se necesitan más estudios para confirmar estos hallazgos y determinar si existe la necesidad de promover intervenciones de salud preventiva, especialmente en el entorno educativo. De este modo, existe un debate considerable sobre la adicción y el abuso a los teléfonos inteligentes entre los adolescentes y su consecuente impacto en su resistencia; no solo en un contexto global, sino también específicamente en la población Ecuatoriana; considerando que los teléfonos inteligentes, a nivel mundial, ocupan más del 50% del mercado y una cuantificación más precisa de los problemas asociados, por ello, es importante puntualizar que la dependencia a los aparatos móviles y el internet en los jóvenes no solo puede dañar las habilidades interpersonales, sino que también puede generar importantes riesgos negativos para la salud y efectos psicológicos nocivos.

Revista UNESUM-Ciencias
Volumen 6, Número 3, 2022
Universidad Estatal del Sur de Manabí
ISSN-e: 2602-8166

Uso de internet por parte de los jóvenes y dependencia de los teléfonos móviles

Impact of human behavior on the construction of educational neuroscience

https://doi.org/10.47230/unesum-ciencias.v6.n3.2022.471

Bibliografía